jueves, 6 de septiembre de 2012
Los ojos del cuerpo - Un Curso de Milagros
Advierte cómo los ojos del cuerpo se
posan en lo exterior sin poder ir
más allá de ello.
Observa cómo se detienen ante lo que no
es nada, incapaces de comprender el
significado que se encuentra más
allá de la forma.
Nada es tan cegador como la percepción
de la forma.
Pues ver la forma significa que el
entendimiento ha quedado velado.
Pues los ojos fueron concebidos para que
viesen un mundo que no existe, y los oídos,
para que oyesen voces insonoras.
Mas hay otros panoramas y sonidos que sí se
pueden ver, oír y comprender.
Pues los ojos y los oídos son sentidos sin sentido,
y lo único que hacen es relatar lo que ven y lo que oyen.
Mas no son ellos los que ven y oyen, sino tú,
quien ensambló cada trozo irregular,
cada migaja y fragmento absurdo de prueba para
que diera testimonio del mundo que deseas.
No permitas que los ojos y los oídos del cuerpo
perciban estos innumerables fragmentos
dentro de la brecha que tú te imaginaste,
ni permitas que persuadan a su hacedor de que
sus fabricaciones son reales.
Los ojos del cuerpo ven únicamente formas.
No pueden ver más allá de aquello para cuya
contemplación fueron fabricados.
Y fueron fabricados para fijarse en los errores
y no ver más allá de ellos.
Su percepción es ciertamente extraña,
pues sólo pueden ver ilusiones, al no poder
ver más allá del bloque de granito del
pecado y al detenerse ante la forma
externa de lo que no es nada.
El árido desierto, las tinieblas y la
falta de vida, sólo se ven a través de los
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Estoy de acuerdo en cada maravillosa imagen y su contenido que compartes
ResponderEliminarUn blog para reflexionar!!
Gracias por compartir
Besitos